La historia de Cipolletti, una ciudad argentina ubicada en la provincia de Río Negro, se entrelaza con la vecina ciudad de Neuquén y la convergencia de ríos que definen su paisaje.
Fundada en 1903, debe su nombre a un destacado político y diplomático italiano, César Cipolletti.
Inicialmente, la región era habitada por comunidades indígenas, y su desarrollo cobró impulso con la llegada del Ferrocarril del Sud a principios del siglo XX. Este hecho marcó el inicio de un crecimiento sostenido, vinculado al auge agrícola y ganadero de la zona.
El río Negro, que fluye majestuosamente en las proximidades, se convirtió en un elemento central de la historia de Cipolletti. La construcción de puentes sobre este río, como el Puente Carretero y el Puente Ferrocarretero, fortaleció los lazos con Neuquén y consolidó la importancia estratégica de la ciudad como punto de conexión.
A lo largo de las décadas, Cipolletti ha experimentado un desarrollo urbanístico significativo, convirtiéndose en un importante centro comercial y cultural. La ciudad ha diversificado su economía, manteniendo su relevancia agroindustrial pero incorporando también sectores como el comercio y los servicios.
Cipolletti se destaca por su ambiente agradable, sus espacios verdes y su conexión con la naturaleza, elementos que han contribuido a atraer residentes y visitantes. Su historia, marcada por la integración con Neuquén y la importancia de los puentes sobre el río Negro, ha forjado una identidad única que la convierte en un punto clave en la región patagónica argentina.